Si habláramos de
lo icónico que puede llegar a ser algo, en cuanto a consolas nos referimos o al
menos una de ellas, no sería desacertado nombrar “la” Nintendo, objeto de deseo
de los más jóvenes por aquel entonces 80’s-90’s, consola que nos dejaría una
cantidad de juegos desde el Mario, Zelda, Metroid, entre otros... que
pasarían a ser sagas legendarias a día de hoy.
Cuando éramos más
pequeños en los grandes centros comerciales, “Pryca en mi caso” solían
tenerla puesta, y allí los chavales nos agolpábamos para poder jugar al juego
que hubiera puesto, el Mario, el Tetris, el Chip n Dale ”Chip y Chop”… y a
muchos más, cada día era una pequeña lotería a ver cuál había.
¿Sabéis lo que
realmente curioso? Hablar sobre una consola de este tipo desde mi perspectiva, ya
que yo en principio no tuve la Nintendo, mi primera consola fue la Atari 2600 y
después llegó la legendaria “al menos para mí”, Master System 1, directa competidora en aquella época de la NES, y
después la Game Boy, llegué a tener la Super Nintendo “el cerebro de la bestia”
antes que la clásica NES.
En algún momento
rendiré homenaje a la Master System como se merece, y a las tardes “y mañanas”
que me pasé batallando sus juegos.
Satoru Iwata“En mi tarjeta de visita, soy un presidente de empresa, en mi mente soy un programador de juegos, pero en mi corazón soy un jugador”
